Cooperativa Río Verde – Un ejemplo de cómo emprender desde el aula

Los alumnos de quinto del Colegio Público Mauricio Tinoco en Los Santos de Maimona (Badajoz) han puesto en marcha su propia cooperativa con el nombre de “Cooperativa Infantil Santeña Jabones Río Verde”para fabricar y comercializar jabones de glicerina. El proyecto está dentro del programa “Junior Emprende” de la Consejería de Educación de la Junta de Extremadura. Con ayuda de su tutora, María José Martínez, los alumnos han realizado un plan de negocio y actualmente ya están comercializando una variada gama de jabones. María José, su profesora, cuenta que los alumnos están motivados y entusiasmados con este proyecto. En  horario de clase se trabajan las unidades didácticas teóricas relacionándolas con los temas de las áreas curriculares. La fabricación de jabones se elabora durante algunos recreos y algunas tardes dentro del colegio.     

                                                                                                               

María José comenta cómo al principio fue necesario explicar a los alumnos los conceptos básicos sobre emprendimiento para que tuvieran una base teórica; en sus propias palabras “Inicialmente el papel de profesor fue importante porque los alumnos no tenían mucha idea de qué significa emprender”. Por eso buena parte del tiempo fue empleado en la enseñanza de valores y capacidades para ser un buen emprendedor, para fortalecer el deseo de emprender. Los niños tuvieron también una “madrina empresarial”, Estrella María Montaño, que les dio una charla sobre su experiencia como emprendedora. Tras las diversas unidades didácticas impartidas, los alumnos presentaron a la clase gran cantidad de ideas empresariales, cuyas ventajas e inconvenientes fueran analizados entre todos. Para elegir la mejor idea fue necesario votar, así que la idea de elaborar jabones fue tomada democráticamente. De la misma manera fue elegido también el nombre de la cooperativa y los cargos de la misma: presidente, vocales, secretario, tesorero e interventora.

Después se realizaron los trámites legales. Cada miembro de la cooperativa rellenó una ficha de registro personal y se realizó entre todos el acta de constitución de la cooperativa. En relación con la parte económica, cada socio aportó un capital inicial de 2 €. Con este dinero los alumnos compraron material para elaborar regalos de Navidad, con su venta consiguieron 120€. Así por fin consiguieron la cantidad necesaria para adquirir la glicerina para elaborar jabones. Un resultado significativo ha sido aprender los trámites reales para solicitar un préstamo real. La cooperativa solicitó, mediante un escrito y presentado un presupuesto completo, un préstamo a la Fundación Maimona, una organización local que da soporte a los emprendedores locales. La entidad decidió cofinanciar el proyecto con 224 €, la mitad como subvención a fondo perdido y otra como préstamo con un interés simbólico. “Están muy animados a pagar el préstamo lo antes posible” afirma su profesora.
 

Tras los trámites oficiales, la cooperativa comenzó el trabajo más gratificante: la fabricación de los jabones con un proceso en cadena, que incluyó la fijación de precios y el etiquetado de los productos. Los jabones fueron hechos de colores diferentes, en moldes distintos: por ejemplo reutilizando cajas de bombones, con lo que consiguieron jabones únicos y creativos. Los alumnos disfrutaron mucho también con la venta, al ver el dinero conseguido con su propio trabajo.
                      

Antes de poner el producto a la venta habían realizado incluso un pequeño estudio de mercado. Además, ellos mismo diseñaron el logotipo de la cooperativa. Los propios alumnos elaboraron los carteles publicitarios que se colocaron en el centro educativo e hicieron publicidad directa al resto de los estudiantes. Actualmente la cooperativa ha recibido la autorización para la venta de jabones en el mercadillo de la localidad.

Aunque los niños demuestran capacidad para la toma de decisiones, el papel del profesor es muy importante porque dirige, coordina y enseña los pasos necesarios para llevar a cabo el proyecto empresarial, afirma su profesora. Ella cuenta que ha sido posible realizar el proyecto porque se han incorporado los contenidos empresariales a las clases normales, por ejemplo, en la clase de matemáticas se explicó la elaboración de los presupuestos, la de lengua para redactar la solicitud del préstamo, la de plástica para hacer la publicidad… así el proyecto ha sido usado como ejemplo práctico de manera multidisciplinar, lo que la da posibilidad de aprender de manera más práctica. 

El proyecto ha tenido muy buenos resultados, pues ha logrado dinamizar a la gente del pueblo. Por ejemplo, los padres están colaborando con la cooperativa con la fabricación del tenderete para la venta,  los letreros y las camisetas que llevarán los cooperativistas durante la venta. Además los alumnos están muy ilusionados con el dinero que pueden ganar. Su idea es usar las ganancias para una excursión de fin de curso y además ayudar a alguna ONG.

Escrito por Anu Lähde, Erasmus Emprendedor en la Fundación Maimona